Contacta con nosotros en: frentenoreste@hotmail.es

martes, 4 de mayo de 2010

LA HORA DE LA DEMOCRACIA





La democracia, ese sistema que tanto defendían los griegos como forma de gobierno ideal, que permitía la participación de todo “ciudadano” en las decisiones de gobierno y puede que se haya convertido en el instrumento de hipnosis ideal para los de arriba.



A día de hoy nuestra sociedad sigue defiendo este sistema de gobierno de manera férrea sin buscar ningún tipo de objeciones que pueda tener, posibles mejoras, cambio etc. Simplemente limitándonos a seguir en manada a la sociedad, una sociedad ciega, sin personalidad propia, sin reflexión alguna, como si estuvieran en un permanente estado de “alienación” en el cual solo se limitan a obedecer y actuar en consecuencia a aquello que se les impone desde pequeños (lo cual no les hace igual o más cómplices que aquellos que se han propuesto), sin preguntarse si aquello que les rodea pueda ser o no el mejor sistema de organización.


Lo cierto es que, limitándonos simplemente a analizar la democracia actual (sin necesidad de plantear otro gobierno posible) nos damos cuenta que “el sistema de gobierno de la mayoría del pueblo” es un mero cuento que nos han vendido aquellos aristócratas que están en el gobierno y que por lo único que se preocupan es por cobrar a fin de mes (y si es posible llegar a diputados para obtener todo ese abanico de ventajas que se les presenta: vacaciones de 6 meses, sueldos elevadísimos, dietas…) y que una vez dentro del pleno, giran la vista hacia el bien personal y reniegan del pueblo, o se limitan a discutir entre ellos y sacan medidas que no satisfacen ni a unos ni a otros.


Pero, ¿Y si no estamos conformes con esa frase sobre la que nuestra sociedad, o mejor dicho, la clase política se sostiene? Como bien dicen, la democracia mira por el bien de la mayoría pero, ¿Acaso se puede considerar mayoría a todas aquellas personas influidas claramente por los medios de comunicación (a su vez dirigidos por el gobierno), que se encargan de hacer posible el fenómeno PPSOE?


En mi opinión no, y la prueba de ello esta en las urnas, donde estos dos partidos obtienen la mayoría de los votos por diversas razones: el capital invertido en campaña electoral, la difusión en los medios, y los votantes. Esos votantes que se dividen en dos: aquellos que están totalmente influidos por este fenómeno PPSOE y aquellos que tienen algo más de personalidad pero acaban por dar su voto a este partido (auque ellos digan que son dos diferentes) al ver que no hay ninguna otra fuerza capaz de romper con esta monotonía.


Como decía un filósofo inglés: “La mayoría, por muy grande que sea, no podrá decidir sin tener en cuenta las dudas y las objeciones de las minorías, ya que la libre comparación de opiniones opuestas es un bien, ya que sirve para discernir todos los aspectos de la verdad”. Y precisamente nuestra democracia actual (diseñada por aquellos que no querían una rebelión del pueblo tras la muerte de un dictador y simplemente implementaron unas medidas como “parche” excluye a las minorías mediante este tipo de control sobre el pueblo, siempre de manera sutil y “constitucional”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario